miércoles, 23 de abril de 2008

Oh My God!

Leyendo en Ordinaria Locura recordé gracias a este poema:


"Nunca he amado a una mujer por lo que ella es, sino porque he estado atrapado en el tiempo con ella, entre llegadas y salidas de trenes y otros compromisos. He amado porque ella era hermosa y éramos dos humanos tendidos en el bosque a la orilla de un oscuro lago o por que ella no era bella y éramos dos humanos que entendían algo sobre el sufrimiento, caminando entre los edificios. Yo he amado porque muchos la han amado o por que muchos son indiferentes a ella, o para hacerla creer que es la única chica en el prado sobre cuyas rodillas apoyaría mi cabeza o para hacerla creer que soy un santo y que ella es amada por un santo. Jamás le he dicho a una mujer que me gusta y cuando he escrito las palabras “mi amor” jamás he querido decir “te amo”

L.Cohen “Poems Written / While Dying of Love”

Que todo lo que me ha atraido de mis relaciones y momentos de intimidad con todas las mujeres son las circunstancias que me unen a ellas. Eso es todo.

Tanto si habia sensacion de peligro como si era un lugar publico, que si un viaje o que era algo desconocido. Pero jamás la mujer en si. No hay nada que me pueda unir a ella simplemente por que no entienden en lo que pienso, en lo que creo y por que su falta de vision ha sido tan a corto plazo que nunca han comprendido mis intereses reales.

Lejos del sexo, de los fajes de la intimidad, no han pasado de ser un simple reducto de mis momentos de ocio.

Y al igual que Ordinaria locura... solo amo las circunstancias.

1 comentario:

Akane dijo...

yo amo al emfermo de ordinaria locura...

humm...